Una, humana contradictoria, acepta que haya mala gente (ioputa) sueltos por ahí, incluso los puedo llegar a entender cuando un ioputa consigue algo a cambio de su ioputez. Vamos que la putada que hace le renta algún beneficio.
Ayer fui a entrar en la cuenta de hotmail desde la que se envía la programación a amigos y clientes del Pay Pay y me salió un terrorífico mensaje diciendome que ya he intentado entrar varias veces con una contraseña errónea y que se me restringe el acceso. Le puse dos velas a Santa Rita y esperé hasta el día de hoy a ver si la cosa se arreglaba. Negativo singular. Me sigue diciendo lo mismo. Entro en el apartado de recuperar contraseña y me da dos opciones:
- Enviar nueva contraseña por correo
- Restablecer la contraseña a través de la pregunta secreta.
En la primera opción me dice que me va a enviar la contraseña a la misma cuenta de correo a la que no puedo entrar... Mmmmmmmmm... Lo veo un poco inútil, no?
Voy a la segunda opción. Como pregunta secreta yo puse el nombre de mi primera mascota, pero... oh! Esa no es la pregunta secreta que me piden, sino los nombres de mis dos mejores amigos de la infancia... ¡¡¡Pero si yo ni me acuerdo!!! ¡¡¡Si la pregunta secreta que puse no fue esa!!!
Bien, encuentro una dirección desde la que me aseguran que me pueden ayudar:
support@hotmail.com Le escribo y le cuento mi poblema. Al poco tiempo, me llega un mensaje en inglés que consigo medio entender y me dice que no sea más torpe en la vida y que vaya al apartado de recuperar contraseña... ¡¡¡¡Rayos, truenos y centellas y tó los muertos de hotmail!!!!
Total, que el ioputa del hacker y los ioputa de hotmail me han hecho perder todas las direcciones de clientes y amigos del Pay Pay y me siento como Calimero, sola y desamparada ante un mundo hostil que desconozco y con un cascarón de huevo sobre la cabeza... Snif