En algunos momentos teníamos la sensación de estar en la isla de la serie "Perdidos", si no fuera porque comíamos mucho mejor que ellos. Porque, eso sí, allí se come de escándalo y muy baratito.
Uno de los platos típicos de los pueblos de la costa son las lapas, cocinadas con un poco de aceite y ajito picado... Cucha!! que están buenísimas. Claro que no son las lapas a las que estamos acostumbrados por aquí, que se usan para pescar, sobre todo. Allí, más que lapas, son lapones. Aquí podéis ver una muestra del tamaño de las lapas y en la otra foto está otro de los platos típicos: La zapateira, que es la cabeza del centollo, a la que le sacan todo el mejunje, lo trituran, lo vuelven a meter y tú te lo pones en tu panecillo... Impresionante
Siguiendo con la gastronomía, en el centro de la isla, en Furnas, tienen una curiosa forma de hacer el potaje. Alrededor del Lago de Furnas el terreno es volcánico, o sea, caliente y se pueden ver calderas (charquitos más o menos grandes) con agua hirviendo por el calor que sube de la tierra. Pues bien, el cocido se hace enterrando la olla con los ingredientes y dejándola tapada bajo tierra unas 8 horas. Pasado ese tiempo, el cocido ya está hecho y llegan hasta el lago las furgonetas de los restaurantes para llevarlas a sus respectivos negocios.
Luego, ya en el restaurante, lo sirven como aquí la pringá, es decir, que no es un plato de cocido, sino que te ponen en un plato la morcilla, chorizo, carne, berza, etc y aparte, si lo pides, en un cuenco, el caldito, que allí te advierten que no está bueno porque para ellos es un sabor que les parece muy fuerte, pero a nosotros nos supo a gloria. Es un sabor muy parecido al del caldo gallego, para que os hagáis una idea
Otra cosa que impresiona en las Azores es la naturaleza, que crece, se expande y se multiplica con avaricia. Aquí me tenéis con un megagirasol. No, no es un espantapájaros... Es un girasolazo.
Vamos, que es el viaje ideal para quienes busquen olvidarse de todo, relajarse y hartarse de ver paisajes preciosos.
Aquí tenéis otro par de fotos: la de la izquierda es una piscina natural de agua salada (que allí se estilan mucho) excavada en las rocas de la playa y las otra son dos de los muchos lagos que hay en la isla.