El nombre elegido de "Campo al revés" para este blog lo decidí en memoria de un mítico día que está señalado en mi calendario de humana contradictoria como una de las jornadas más absurdas de mi vida. Nuestro grupito de payadictos decidió hacer senderismo. Era para vernos, vestidos para la ocasión con ropita del Decathlon, botas de montaña, fiambreras y todos sus avíos. Finalmente, el plan de ir de senderismo campo a través, se convirtió en que sacamos lo que llevabamos en las fiambreras en la casa de la payadicta en la que habíamos quedado, degustarlo, realizar la tertulia de sobremesa correspondiente y, finalmente, irnos a dormir cada uno a su casa. Decidimos bautizar ese tipo de reuniones como "Campo al revés", en vez de "Campo a través".