miércoles, 4 de junio de 2008

Picaítos

En todos los trabajos ocurren cosas raras, pero en los que tienes que estar en contacto con "la gente" más aún, porque -aceptémoslo- hay mucho picaíto por ahí suelto.
Mi despacho está en una segunda planta y hace cinco minutos he bajado a la primera y un señor al que nunca he visto ni he tenido el gusto de ser presentada me dice:

- "¿Qué? Te he pillado en el baño, ¿no?... Como no estabas en tu puesto de trabajo..."

Con atónita cara le he respondido:

- "Caballero, yo no trabajo en este departamento. El compañero habrá salido un momento y ahora le atenderá".

Con atónita cara, el usuario me ha dicho:

- "No te pongas asín, shoshete, es que pensé que te habías escaqueao... tusabe".

Ya no supe qué decirle... Me desarmó con lo de "shoshete".

En mi lugar de trabajo hay un patio trasero muy bonito con bancos, una fuente, geranios... muy relajante, la verdad. Bien, pues otro usuario picaíto nos ha puesto una hoja de reclamaciones porque llegó una mañana a ver ese patio y la fuente no estaba funcionando... algo que se arreglaba con darle a un botón tan solo y ponerla a que eche agüita fresca del manantial, pero el señor opinó que se arreglaba antes si ponía una hoja de reclamaciones.

Hace unas semanas, estaba yo en la planta baja y llega un visitante japonés -con la mejor de sus sonrisas- y, señalando la cámara de fotos que (evidentemente) llevaba colgada del cuello, comienza a decirme algo así como:

- "Huuucho asrtetaka mishishé..." y otro montón de palabras que sonaban todas iguales.

- "Sorry -le digo, con el mejor de mis acentos- duyuspikinglish?"

El japonés sigue señalando la cámara y me dice:

- "Mishishé... Mishishé tas pongé huuuucho"

- Excusemuá -le digo, con un acento francés inventado- paglevú fransé?

Y él me vuelve a repetir lo de "mishishé... mishishé...". Yo me encogí de hombros y le dije:

- "Lo siento, pisha, pero no entiendo qué es mishishé ni qué es lo que quieres".

En ese momento, el japonés sonríe aún más y me responde:

- "Aaaaahh... foto, quiere foto casa"

Totá, que el mishishé lo que quería era saber si podía entrar a hacer fotos al patio. Lo curioso es que me respondió algo que yo entendiera sólo cuando yo le hablé en castellano-gaditano-universal.

Cosas de la globalización.